Prepararse para el examen de admisión de la UNAM es un reto importante. Muchos aspirantes dedican horas al estudio, pero no siempre logran los resultados que esperan. La razón no está en la falta de esfuerzo, sino en los errores de estrategia. Estudiar mucho no garantiza el éxito; estudiar bien, sí. A continuación, conocerás los cinco errores más comunes al estudiar para la UNAM y cómo puedes evitarlos para lograr un aprendizaje más efectivo.
1. Estudiar sin un plan claro
Uno de los errores más frecuentes es comenzar a estudiar sin una organización previa. Esto genera estrés, pérdida de tiempo y sensación de descontrol. ¿La solución? Analiza los temas del examen, su dificultad y el tiempo que tienes disponible. Luego, crea un calendario de estudio con fechas definidas para repasar y avanzar. Establece metas semanales utilizando la técnica SMART (metas específicas, medibles, alcanzables, relevantes y con tiempo límite). Herramientas como Google Calendar o Notion pueden ayudarte a mantenerte enfocado.
2. Memorizar sin entender
Muchos estudiantes creen que memorizar todo es suficiente, pero esta técnica es poco efectiva en exámenes que evalúan razonamiento y comprensión, como el de la UNAM. ¿Cómo evitarlo? Utiliza la técnica de Feynman (explicar con tus palabras), crea mapas mentales, y practica con Active Recall (recordar sin ver la respuesta). Lo importante no es cuánto recuerdas, sino cuánto entiendes.
3. Usar técnicas de estudio inadecuadas
No todos los métodos funcionan igual para todos. Algunos aprenden mejor con imágenes (visual), otros con sonidos (auditivo), movimientos (kinestésico), o leyendo y escribiendo. ¿Qué hacer? Descubre tu estilo de aprendizaje y adapta tus métodos según la materia. Por ejemplo, en matemáticas puedes usar ejercicios prácticos, mientras que en historia puedes usar líneas del tiempo o videos. Además, procura estudiar en un ambiente con buena iluminación, temperatura adecuada y mobiliario cómodo.
4. Estudiar con distracciones
Estar revisando el celular, viendo redes sociales o teniendo interrupciones constantes disminuye tu concentración y tu rendimiento. ¿La clave? Crea un espacio exclusivo para estudiar, apaga notificaciones y aplica técnicas como Pomodoro (25 minutos de estudio, 5 de descanso) o Time Blocking (bloques de tiempo enfocados). Para evitar distracciones internas, escribe lo que te preocupa antes de estudiar o practica mindfulness por 5 minutos.
5. Descuidar el descanso y el bienestar
Estudiar muchas horas seguidas sin descansar puede parecer productivo, pero en realidad afecta tu memoria y comprensión. ¿Qué necesitas? Dormir de 7 a 9 horas por noche, hacer pausas cada cierto tiempo, mantener una alimentación equilibrada, hidratarte y moverte. Un cuerpo y mente sanos aprenden mejor.
Semanas 1-2: Organización y planificación.
Semanas 3-4: Comprensión activa de temas.
Semanas 5-6: Control del entorno y distracciones.
Semanas 7-8: Técnicas específicas de estudio.
Semana 9+: Hábitos de descanso y bienestar.
Estudiar para la UNAM no se trata solo de cantidad, sino de calidad. Corregir estos cinco errores puede marcar la diferencia entre un resultado regular y uno excelente. No esperes al último momento: identifica uno de estos errores hoy, aplica la estrategia recomendada y da el primer paso hacia un estudio más inteligente, organizado y eficaz.
Tu ingreso a la UNAM empieza con una buena estrategia. ¡Tú puedes lograrlo!